Butterfield 8 (Daniel Mann, 1960)Basada en una novela de John O'Hara's, cuenta la historia de Gloria Wandrous (Elizabeth Taylor) Una mujer que finge una actividad como modelo, cuando en realidad se dedica a la prostitución de lujo en un burdel llamado BUTTERFIELD 8. Una mañana aparece en la casa (mas precisamente en la cama) del millonario Weston Liggett (Laurence Harvey) con un sobre que contiene 250 dolares; enfurecida y humillada, se propone vengarse robandole un abrigo a la mujer de éste. Gloria terminara enamorada del hombre y el abrigo se convertirá en motivo de conflicto con él.Pese a que en su momento recibió malas criticas, el film fue un enorme éxito de publico, viéndolo hoy no carece de atractivo. Esta bien narrado, tiene una gran elegancia formal, una maravillosa fotografía en tecnicolor a cargo de Joseph Ruttenberg y Charles Harten, y el tema de la prostitución esta tratado con sutileza, pero la película es por sobre todas las cosas un formidable trabajo de Elizabeth Taylor, que le pone cuerpo y alma a su Gloria (merecidamente ganadora del Oscar en una actuación moderna que tiene vigencia hasta nuestros días) además de lucir terriblemente hermosa, tal vez en el momento mas alto de su belleza y sensualidad. En Argentina la Conocimos como "Una venus en visón".
Hay dos secuencias icónicas de la película, que ya son parte de la historia del cine, la primera es el comienzo del filme, donde todo transcurre en silencio a puro accionar y gestualidad y que finaliza con el personaje de Taylor escribiendo con su lápiz labial en el espejo una frase de rebeldía. Y la segunda para mi aún mejor ! Cuando el personaje de Harvey agarra con violencia y fuerza el brazo de Gloria (Taylor) y no lo suelta, no la deja escapar ! Y en respuesta a esto
Gloria le clava el taco aguja de su zapato en el zapato de él (es decir en su pie) a ver quién resiste más el dolor físico ! Es una disputa, una medición de fuerza "entre macho y hembra" a ver quién resiste más el dolor ; y por supuesto gana ella !!
Fue el primer Oscar de la actriz, y su cuarta nominación consecutiva, luego de "El árbol de la vida" (Eduard Dmytryk,1957) "La gata sobre el tejado de zinc caliente" (Richard Brooks,1958) y "De repente el último verano" (Joseph L. Mankiewicz,1959)