Belleza viril, carisma, versatilidad; fueron los tres ejes o elementos que marcaron la personalidad y carrera de esta enorme figura del cine estadounidense. Autodidacta por naturaleza; cuando Lancaster irrumpió a mediados de los '40, por presencia y capacidad de acróbata (había sido trapecista de circo) parecía estar destinado a roles en películas de aventuras, del lejano oeste (Wéstern) o de acción bélica. Fue gracias a su afán de superación personal, tenacidad, y empecinamiento por no dejarse encasillar, que logro todo lo que logro ! Se convirtió en uno de los actores mas notables de su época, por la variedad de géneros que transitó, y por la riqueza de papeles que pudo elegir. Capaz de hacer roles en películas de aventuras, wéstern, o acción bélica; como de repente asumir personajes profundamente dramáticos como en: Todos eran mis hijos, De aquí a la eternidad, La rosa tatuada, Trapecio, Mesas separadas, Elmer Gantry, El juicio de Nuremberg, El hombre de Alcatraz o La celda olvidada (Como también se la conoció) Un niño espera, Siete días de Mayo. Sin olvidar que grandes creadores del cine europeo repararon en él y lo llevaron a alturas superlativas como Luchino Visconti (El gatopardo, Grupo de Familia) Bernardo Bertolucci (Novecento) El propio Louis Malle (Atlantic City) Ganó el Oscar por Elmer Gantry (Richard Brooks, 1960) y recibió otras tres nominaciones : De aquí a la eternidad (Fred Zinneman, 1953) La celda olvidada (John Frankenheimer, 1962) y Atlantic City (Louis Malle, 1980) También recibió otras distinciones como El Oso de Plata en el Festival de Berlin por Trapecio (Carol Reed, 1956) donde revivió el mundo del circo. Y La Copa Volpi en El Festival de Venecia por La celda olvidada. Ademas de dos premios BAFTA, uno por esta película, y otro por Atlantic City. De los actores norteamericanos de las nuevas generaciones, no hay ninguno que pueda igualar a este verdadero "Monstruo Sagrado" |
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